jueves, 10 de julio de 2014

Las Dieciséis Huertas de Fernán Núñez

El Patrimonio Histórico de Fernán Núñez

Francisco Gutiérrez de los Ríos y Córdoba, tercer conde de la Villa de Fernán Núñez heredó en 1662 el título y falleció en 1721. En estos 59 años sometió  a la población a incesantes impuestos, que tuvieron como contrapunto una serie de políticas que favorecieron el crecimiento demográfico y una mejora en la calidad de la vida de nuestros antepasados.  En el año 1679, este conde, ante el poco caudal del arroyo Ventojil, afluente del Guadajoz reunió todas las aguas dispersas de las distintas fuentes de la villa y las dirigió de forma que tras mover varios molinos harineros terminaran regando dieciséis huertas, treintaseis fanegas de tierra, establecidas en la margen derecha de dicho arroyo, en parte de las tierras de su vizcondado de Abencaes, concretamente las que lindaban con sus pagos de La Estacada del Pozuelo y Matallana. Estas tierras pasarían a formar un nuevo pago que se llamaría Las Huertas del Conde y posteriormente Las Huertas del Duque
Las dieciseis huertas, desde la Carretera a San Sebastián de los Ballesteros
 Las huertas fueron arrendadas, al igual que las tierras de varios cortijos de propiedad condal, en pequeñas parcelas que se transmitían de padres a hijos. Con la llegada de la democracia, tras una compra simbólica, las tierras pasaron a manos de las familias que las cultivaban desde aquellos inicios.
A raíz de su creación, otro pago hortelano, más antiguo, situado al noreste justo debajo del pago de El Higueral, contiguo al de Valdeconejos, fue abandonado, dejándose por perdido, pasándose a llamar Las Huertas Perdías, donde hoy se ubica la fuente de los Gitanos o de las Huertas Perdías.
La Fuente de los Gitanos, en el año 1992. Fotografía de Fernando Serrano.
Plano de localización
 Cuenta Crespín Cuesta en su libro Piedras y Cruces que las huertas de nuestro pueblo no son solo interesantes por su belleza o valor agroalimentario (en decadencia por desgracia) sino porque tienen algo típico y propio de ellas: la Alcaldía.
Una institución centenaria que, al igual que el Tribunal de las Aguas de Valencia, entiende en cuestiones de su propia y exclusiva jurisdicción. Ante la Alcaldía de las Huertas acuden los huertanos, en litigio por cuestiones de agua o lindes, y el Alcalde, asistido de uno o varios vecinos hortelanos,  designa, juzga y falla sobre el pleito, no acudiéndose a la justicia ordinaria, sino es en caso de que la sentencia se crea injusta o se dañen los intereses de alguno de los litigantes.
Esta institución creada en fecha inmemorial en Fernán Núñez, se ha mantenido en el tiempo hasta fechas recientes, de hecho hoy día no existe la figura como tal del alcalde pero si que hay un hortelano que se encarga de administrar el agua y coordinar las juntas que los hortelanos realicen por motivos como la reciente propuesta de intentar que el agua de la depuradora municipal se dirija hasta las mismas.
Las Huertas. Fotografía de Juan Luis Yuste.
Los productos de las huertas de Fernán Núñez llegaron a ser muy conocidos y apreciados, alcanzando fama a nivel provincial, como en el caso de los pimientos. Las frutas y hortalizas se vendían en la Plaza de Armas y posteriormente, en el Mercado de Abastos de la calle Miguel Hernández, conocido como La Plaza. Hoy son pocas las huertas que quedan y el olivar se ha hecho presente en la mayoría de ellas e incluso podemos ver plantaciones de palmeras.
Las huertas han dejado una huella imborrable en sus más de trescientos años de historia en nuestro pueblo, modificaron nuestro término creando nuevos topónimos como el Callejón de las Huertas o La Cuesta de las Huertas que es como todo fernannuñense conoce a la cuesta de la nacional 331, que ahora conecta nuestro pueblo con la autovía A45, y que era la puerta de entrada para todos los pueblos de la comarca de la Campiña Sur.
 
El inicio de la Cuesta de las Huertas,  la A45, el Monte la Mata y al fondo, Sierra Morena









  · Información editada procedente de:
Piedras y Cruces. Francisco Crespín Cuesta
Antonio Ariza Naranjo, Rafael Naranjo Ramírez. Las huertas: sus cultivos