Una polaca de 91 años, declarada muerta en su casa por una médica y trasladada a la morgue, se despertó 11 horas después, informó este jueves el canal de televisión estatal TVP.
El 6 de noviembre Janina Kolkiewicz, habitante de Ostrow Lubelski en el este de Polonia, se despertó en la cámara frigorífica de la morgue, dejando helados a los empleados que vieron moverse la bolsa negra que contenía el supuesto cadáver.
“No entiendo qué pasó. Su corazón había dejado de latir y ya no respiraba. Estaba segura de que había muerto” y así “completé el acta de defunción”, declaró al canal la doctora Wieslawa Czyz.
“Mí tía no sabe qué le pasó, porque sufre de esclerosis muy avanzada”, indicó a su vez a la prensa local la sobrina de la protagonista de esta historia. “De regreso en casa, dijo que tenía mucho frío y pidió un té caliente”, agregó.
La policía inició una investigación sobre el insólito episodio, por el que la médica podría tener que responder ante la justicia, señaló TVP.