Brittany es bien perversita. Le gusta la zoofilia y el incesto.
Una joven de 20 años de Arizona fue detenida luego de que confesara haber tenido relaciones "vaginales y orales"
con los canes de su casa. La desequilibrada zoofílica, madre de un
bebé, también admitió que deseaba probar el incesto. Una joyita.
Brittany Angelique Sonnier, de 20 años, ciudadana de Arizona, fue encarcelada luego de que confesara haber tenido sexo con el perro de su familia.
De acuerdo a la policía de Lake Havasu City, se inició una investigación el mes pasado después de que Sonnier dijo a su novio que ella gustaba de “tener relaciones sexuales con perros” y había estado teniendo intimidad con los canes de su familia desde los 13 años.
El informe de la detención alega además que Sonnier tenía relaciones vaginales y orales con los perros y “los entrenó para que no actúen extraño cerca de otras personas”.
El novio dijo a la policía que estaba “preocupado y asustado” después de que Sonnier le mostrara imágenes de personas que tienen sexo con animales. Sonnier también le dijo que a ella le interesaba el incesto.
A raíz de la confesión el novio trató de hablar con el padre de Sonnier acerca de lo que sucedía. El progenitor le habría dicho que su hija le había admitido haber tenido sexo con perros en el pasado, y que se centró en tratar de obtener la custodia de su nieto (Sonnier tiene un hijo pequeño).
El novio también le dijo a la policía que él cree que Sonnier está embarazada de su hijo, pero ella se negó a tomar una prueba de embarazo.
A raíz de una investigación sobre los hechos denunciados, Sonnier fue acusada originalmente de bestialidad. Posteriormente fue acusada de dos cargos de crímenes contra la naturaleza.
De acuerdo a la policía de Lake Havasu City, se inició una investigación el mes pasado después de que Sonnier dijo a su novio que ella gustaba de “tener relaciones sexuales con perros” y había estado teniendo intimidad con los canes de su familia desde los 13 años.
El informe de la detención alega además que Sonnier tenía relaciones vaginales y orales con los perros y “los entrenó para que no actúen extraño cerca de otras personas”.
El novio dijo a la policía que estaba “preocupado y asustado” después de que Sonnier le mostrara imágenes de personas que tienen sexo con animales. Sonnier también le dijo que a ella le interesaba el incesto.
A raíz de la confesión el novio trató de hablar con el padre de Sonnier acerca de lo que sucedía. El progenitor le habría dicho que su hija le había admitido haber tenido sexo con perros en el pasado, y que se centró en tratar de obtener la custodia de su nieto (Sonnier tiene un hijo pequeño).
El novio también le dijo a la policía que él cree que Sonnier está embarazada de su hijo, pero ella se negó a tomar una prueba de embarazo.
A raíz de una investigación sobre los hechos denunciados, Sonnier fue acusada originalmente de bestialidad. Posteriormente fue acusada de dos cargos de crímenes contra la naturaleza.
