En Inglaterra, la homofobia va en aumento y las agresiones a los gays ya son moneda corriente. Tal el caso de Robert Kingsford, de 21 años, que fue atacado brutalmente mientras trataba de proteger a su amigo, de 18.

La policía está buscando a testigos del repudiable hecho después de que dos hombres vestidos con tutús de ballet de color rosa lanzaron un brutal ataque homofóbico.

El joven terminó con cortes y contusiones graves, los ojos negros y los labios hinchados después de ser pateado y golpeado en el suelo.

Su padre, Brian, publicó a través de Facebook una foto de su hijo en el hospital, en un intento por ayudar a capturar a los responsables.

Él escribió: ‘Mi hijo temía que esto le sucediera en Surbiton High Street... los dos agresores estaban vestidos como hadas de color rosa y la policía los están buscando”.

“Estos matones necesitan ser capturados. Si usted sabe quiénes son y tiene conciencia, por favor denunciarlos a la policía, la próxima vez pueden matar a alguien”, agregó.
Al pasar junto a un grupo de dos hombres y tres mujeres, Robert y su amigo fueron sometidos a agresiones homofóbicas por uno de los hombres. Las víctimas se alejaron, pero luego fueron abordados nuevamente por los hombres y Robert resultó el más golpeado, al intentar defender a su amigo.