miércoles, 5 de noviembre de 2014

"LA ORDEN CONTRA MARTÍN VILLA ES EL TRIUNFO DE LA JUSTICIA UNIVERSAL"


Inés García-Holgado, querellante en la causa argentina por crímenes del franquismo, viene a Astorga al homenaje de su tío abuelo .

Diario de León / ANA GAITERO / 05-11-2014

Inés García-Holgado es sobrina nieta del edil astorgano fusilado en Hervás. - dl

«La felicidad me embarga. Martín Villa es responsable entre otros delitos de la matanza de los trabajadores de Vitoria. Triunfa nuevamente el principio de justicia universal». Con estas palabras reaccionó Inés García-Holgado a la orden de detención que la jueza argentina Servini de Cubría dictó contra 20 imputados por crímenes cometidos durante el franquismo entre los que se encuentran los exministros leoneses Rodolfo Martín Villa y Fernando Suárez González.
Inés García-Holgado es argentina de raíces españolas y una de las querellantes, junto a Adriana Fernández y Darío Rivas, en la causa contra el franquismo que piden justicia para sus antepasados leoneses fusilados o paseados durante la Guerra Civil y la posguerra.
Ha querido la casualidad que la orden de detención que Servini ha dado a la Interpol se produjera en vísperas de su visita a Astorga, donde hablará sobre la querella y participará en un homenaje a su tío abuelo Luis García Holgado, organizado por el Ateneo Republicano de Astorga y el Ayuntamiento de Astorga. Un viaje de 10.000 kilómetros a una ciudad que no conoce pero y la que está agradecida.
García Holgado fue concejal socialista en el ayuntamiento de la capital maragata entre 1931 y 1934 y sería fusilado el 21 de septiembre de 1936 en la carretera de Baños de Montemayor (Cáceres). Luis García Holgado se había trasladado a esta provincia, a la localidad de Hervás, como funcionario de Correos. «Aprendí la trágica historia de mi familia a través de los relatos de mi abuela Mauricia Holgado Barrio. Ella me contó cómo mis dos tíos abuelos (Elías y Luis García Holgado) fueron condenados por su militancia política de izquierdas, mi tío Vicente desaparecido durante la guerra y mi abuelo Vicente sospechosamente por las escaleras del séptimo piso de la Dirección General de Pesca en 1946», cuenta.
Unos años después, comprobó que la historia oral de la abuela «era tan trágica como ella narraba. En ningún momento pensé que la historia familiar fuera mentira, sino que me costaba creer que tanta crueldad fuera cierta», asegura.
Hace 15 años comenzó la búsqueda de «memoria, verdad y justicia». Participó en foros e investigó en los archivos españoles desde Argentina. «Logré ubicarlos, todavía falta», comenta. Encontró el expediente de su tío abuelo Luis García Holgado en el Archivo de la Memoria de Salamanca. «Tener acceso a los sumarios de mis familiares, significó confirmar los relatos de mi abuela, no solamente confirmarlos, sino horrorizarme más», añade.
Cuando el juez Baltasar Garzón fue inhabilitado en 2008 se consideró la posibilidad de presentar una querella en Argentina. El 14 de abril de 2010 Inés García-Holgado fue una de las primeras querellantes. «Busco la investigación de la verdad. Los nombres de quienes fusilaron y firmaron su sentencia de muerte si la hubiere», alega como motivos. También quiere «retratarlos ante la sociedad» pues aunque los «asesinos están muertos, sus nombres quedarán para la historia».
La memoria histórica, alega, no se limita a «exhumar y homenajear» sino que incluye «también la investigación judicial». En su opinión, la búsqueda de «la verdad y la justicia no abre heridas, por el contrario las heridas están abiertas». Actos como el homenaje a su tío abuelo «sí contribuyen a cerrar heridas, pero todavía existe mucho camino para la reconciliación».
Inés García-Holgado elogia el «desprendimiento» de «militantes políticos o sociales, nuestras familias supieron jugarse hasta el último momento por las ideas que defendían». «Pongámonos en el lugar de aquellos que habiendo empeñado su palabra, por su honor, con altura ética, sabe llevarlo hasta el final por más que le cueste la vida , y entre ellos reconozco a mi tío abuelo».
El viaje desde Argentina a Astorga le emociona sobremanera porque será una ocasión para conocer a muchos de sus familiares. Quiere seguir la búsqueda de los familiares de los que aún no tiene noticias y «comenzar la reivindicación largamente ansiada entre mis familiares».
FUSILADO, ATROPELLADO Y EXPUESTO AL PÚBLICO

Familia García Holgado -

A los asesinos de Luis García Holgado no les bastó con abatirle a tiros. Después de muerto, cuenta el Ateneo Republicano de Astorga, fue pisoteado varias veces por un carro y su cadáver estuvo expuesto durante varios días en el pueblo de Hervás como ejemplo de «rojo». Nacido en La Fregeneda (Salamanca) en 1897, llegó a Astorga como funcionario de Correos. En la capital maragata se inició en la militancia política y sindical, PSOE y UGT, y formó una familia con Modesta Fuertes. Fue concejal entre 1931 y 1934. Conocido como anticlerical y masón, fue trasladado a Hervás por participar en la revolución de 1934. Volvió a la política y llegó a ser teniente de alcalde del municipio cacereño. El golpe de julio de 1936 lo pilló en Madrid, pero se trasladó a Hervás y fue detenido y torturado. El 21 de septiembre fue fusilado. Le quitaron el reloj y los zapatos. Su familia, que sobrevivió de la venta de mantecadas en la estación, trasladó sus restos al panteón familiar de Astorga en los años 70: «Gracias, Astorga», dice su sobrina nieta. «Por luchar sin cesar, por la apertura de la fosa común y por este homenaje», enfatiza.