martes, 8 de abril de 2014

Mañana se producirá una alineación entre el Sol, la Tierra y Marte


Para el próximo día 8 de abril está previsto un extraño fenómeno cósmico: tendrá lugar una alineación planetaria, en la que nosotros, por cierto, participaremos. A las 20:00 horas Tiempo Universal (a las 22:00 horas en España), el planeta Tierra y el planeta Marte alcanzarán el punto en su órbita en el que trazan una línea perfecta en conjunción con el Sol.
La alineación de los tres cuerpos celestes hará que veamos el planeta rojo en la bóveda celeste en el lado contrario al de la estrella, lo que explica que este acontecimiento reciba el nombre de “oposición de Marte”.
La oposición de un planeta exterior tiene lugar cuando el Sol, la Tierra y dicho planeta se alinean. En el caso de Marte, este acontecimiento astronómico se produce cada 778 días (dos años, un mes y 18 días), dado que la Tierra completa una vuelta en torno al Sol en la mitad de tiempo que Marte, de modo que debe recorrer una distancia superior a la de su órbita para volver a encontrarse con el planeta.
Durante los días previos a la oposición, el planeta Marte va reduciendo considerablemente su distancia con el nuestro al aproximarse a unos 300 kilómetros por minuto. Sin embargo no será hasta días después, el lunes 14, cuando se alcance el punto de mínima distancia: 92 millones de kilómetros. Esto es debido a que la órbita de la Tierra es prácticamente circular, pero la de Marte es más bien elíptica, tal y como descubrió Kepler, lo que hace que la distancia entre ambas varíe, pudiendo coincidir la alineación con el perihelio (punto de la órbita más cercano al Sol) o con el afelio (punto de la órbita más alejado del Sol).
No obstante, en el momento de la oposición, nos separará ya una distancia ridícula en la escala espacial, lo que lo convertirá el planeta en blanco perfecto para los telescopios y también para la vista de los más ávidos, ya que presentará un mayor tamaño aparente y un brillo anaranjado casi diez veces más brillante que el de una estrella de primera magnitud una vez el sol se esconda por el oeste.

Los astrónomos recomiendan por ello observar el planeta durante su oposición pero también durante los días posteriores, especialmente en la madrugada del día 15, cuando este acompañe a una luna enrojecida producto de la sombra proyectada por la Tierra.