No es casualidad que la Banda de Cornetas y Tambores la Fé de Fernán Núñez, se encuentre entre las mejores, no sólo de la província de Córdoba, sino entre las más exquisitas de Andalucía. El trabajo diário de todos sus componentes, durante todo el año, lleva dando frutos durante mucho tiempo, y eso se nota en todas y en cada una de sus composiciones. Buena prueba de ello, son las imágenes que podeis ver en esta información, y que demuestran que tenemos que sentirnos orgullosos de esta extraordinaria banda, que lleva el nombre de Fernán Núñez, allá por donde va.
Sin embargo, hay personas que no piensan lo mismo en nuestra localidad, como así lo demuestra un comentario que me ha hecho llegar un integrante de esta banda:
El domingo viví uno de esos momentos que se te clavan en la tela más profunda del alma gracias al sentimiento hecho arte, plasmado en una interpretación musical magistral realizada por NUESTRA Banda de cornetas y tambores La Fé de Fernan Nuñez.
El fruto del trabajo diario, de incontables horas de ensayo, de la ilusión, se transformó en una sinfonía de notas acompasadas y con tanto sentimiento ejecutadas que puso en pié a unos cofrades sevillanos en una iglesia ecijana. Todos nos sentimos transportados allí donde nuestra fé se hace pasión, yo al menos cerré los ojos y ví a mi Soledad salir por el cancel de Santa Marina vestida de Rosario, Esperanza, Angustias, Lagrimas, Transito o Dolores. ¡Que bién lo hicieron nuestros muchachos! ¡Que aplauso tan largo y sentido! Colocaron a Fernan Nuñez en el mapa ecijano.
Y ahora me entero de que para la Semana Santa Chica que debería ser cuna de cofrades, de costaleros, de músicos y para la que NUESTRA banda ha hecho colaboraciónes desinteresadas desde la primera vez que salió a la calle, se ha elegido por votación a la Banda de Santa Cruz dejando a la nuestra de lado.
Así nos va en este bendito Fernan Nuñez, somos incapaces de defender cualquier iniciativa de nuestros paisanos. No nos damos cuenta de que nos estamos quedando a la cola de todos los pueblos de Cordoba. ¿Cuando vamos a empezar a dar importancia a lo nuestro?
