miércoles, 30 de mayo de 2012

Como se negó a usarla, se la cortó

(Imagen ilustrativa-archivo)
(Imagen ilustrativa-archivo)
En Afganistán, un hombre le cercenó la lengua a su esposa embarazada porque ésta se negó a ejercer la prostitución. La joven, de 16 años, además fue duramente golpeada por su marido quien le provocó la pérdida del hijo que esperaba.
Un joven afgano le cortó la lengua de su esposa, adolescente y embarazada, en el norte de Afganistán después de que ella se negase a ejercer la prostitución, informaron fuentes oficiales y cercanas a la víctima al canal de televisión local Tolo.

El suceso tuvo lugar el martes en el distrito de Chahar Bolak, en la provincia de Balkh, donde la mujer, de 16 años e identificada como Negina, fue objeto de una paliza a manos de su marido que provocó que perdiera el bebé de siete meses del que estaba embarazada.

La madre de Negina explicó que las palizas del yerno, cinco años mayor que la esposa, eran frecuentes y que aunque los médicos han cosido la lengua a la joven, pasará algún tiempo hasta que pueda volver a hablar.

El jefe de seguridad de la provincia, Abdul Razaq Qaderi, informó de que la policía ha encarcelado al maltratador.
La jefa del Consejo de Administración provincial sobre la Mujer, Fariba Majid, aseguró, por su parte, que se trata del peor caso de violencia de género registrado en Balkh.
Majid aclaró que este año han contabilizado al menos 40 casos de abusos contra mujeres en la provincia, pero que se trata de la primera vez que un hombre corta la lengua a su mujer.

La Misión de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) denunció el pasado noviembre que queda un “largo camino por recorrer” en la aplicación de la legislación que protege a las mujeres afganas contra la violencia de género.

Según este organismo, en Afganistán las leyes chocan con prácticas socialmente aceptadas como la compra-venta de mujeres para el matrimonio, las bodas infantiles o forzadas, las violaciones y el “baad” (regalo de una mujer para resolver una disputa familiar).