La culpable de quemarla, Natalie Dimitrovska, se obsesionó con una presunta relación entre Vulin y su marido, y le lanzó un bote de alcohol desnaturalizado encima, y la prendió fuego después.

Natalie fue condenada a 17 años en prisión. En tanto, Dana Vulin, tras cuatro años de dura recuperación, se siente "una persona completamente nueva". "Quiero que la gente sepa que no estoy deshecha. Mostrar mis cicatrices muestra lo lejos que he llegado", declaró en ideal.es