Todos recordamos el “atado y bien atado” que pronunció Franco en las Cortes cuando nombró sucesor del régimen dictatorial a Juan Carlos de Borbón.
Era el año 1969. En ese año las Cortes nombran sucesor de Franco a Juan Carlos.
¿Después de cuarenta y tres años en que situación se encuentra la Monarquía?
Juan Carlos, cuando a la muerte de Franco es nombrado rey de España, accede a la Jefatura del Estado con el juramento de lealtad y fidelidad a régimen de Franco y a los principios del movimiento nacional del 18 de julio de 1936.
Posteriormente, y en base a que sólo se reforma lo que se quiere conservar, abraza la democracia que formalmente se regula con la Constitución de 1978.
En 1978 se aprueba una Constitución con un 44% de ciudadanos censados que no la votó.
A partir de esa fecha los franquistas se van “reconvirtiendo en demócratas”. Hoy en día los herederos de Franco se hayan instalados en los puestos claves de las instituciones del Estado.
El Tribunal Constitucional, el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Supremo y la Administración Pública son moradas en las que hace y deshacen a su antojo y que tienen en el Partido Popular el vivero de reproducción de la especie.
Desde las instituciones que controlan, día tras día lanzan sus ataques contra los derechos y libertades conquistados.
Sin embargo a día de hoy, la mayoría de los ciudadanos hemos puesto ya al descubierto el significado de la Reforma y de su Constitución.
Con una frase lapidaria, LE LLAMAN DEMOCRACIA Y NO LO ES, que es repetida en cada una de las manifestaciones que se celebran en este país, los ciudadanos proclamamos una y otra vez la falsedad de la reforma política y su constitución.
Si a esta situación le unimos los escándalos que últimamente envuelve a la Casa Real (caso Urdagarín, el presupuesto público de que goza la Casa Real, el caso Froilan, las “andanzas y cacerías” del Borbón… el resultado no se deja esperar.
Los españoles estamos hartos de que nos de tantos “ejemplos de honestidad”, “ejemplos de honradez”, “ejemplos de sacrificios” “ejemplos de austeridad”…
Una institución tan anacrónica y tan poco ejemplar no tiene cabida y es un claro obstáculo para la democracia y la defensa de nuestros derechos y libertades.
Desde casi todos los medios de comunicación; con el Grupo Prisa a la cabeza, se solicita la ABDICACIÓN.
Lejos de esta fórmula los trabajadores, los ciudadanos españoles lo que deseamos en la derogación de la Monarquía.
Los españoles tenemos el derecho a elegir el régimen del que queremos dotarnos. Por todo ello hoy más que nunca es necesario UN REFEREMDUM SOBRE MONARQUÍA O REPÚBLICA.
