sábado, 6 de septiembre de 2014

¿PODREMOS?


¿PODREMOS?

En España ningún modelo de Estado ha funcionado jamás. Las monarquías han sido un monstruario aborrecible de engendros ineptos al servicio de las oligarquías agrarias, financieras y religiosas. Las repúblicas, que intentaron devolver el poder al pueblo, saboteadas por la incultura, los fanatismos y los poderes anteriores, también fracasaron. Las dictaduras, tradicionalmente al servicio de las siniestras oligarquías que siempre mangonearon el solar patrio, el peor de los desastres.

Y lo de ahora, una descarada plutocracia degenerada en cloacocracia que pretende pasar por democracia o las “cracias” que hagan falta, ya lo estamos viendo: al servicio ahora de insaciables oligarquías corruptas de origen neoliberal. Y el rebaño español bien ordeñado, esquilado y asustado, creyéndose que manda. Es el truco de los forajidos de Armani que nos mangonean para sus dueños: hacernos creer que mandamos.

Y no. Si en España ha habido 35 años de calma chicha, ha sido precisamente porque el poder ha seguido estando en manos de los que siempre estuvo, al servicio ahora del neoliberalismo. Y si las nuevas generaciones quieren menear castas y poltronas a estas alturas de la historia, se va a acabar la calma, lo vienen avisando porque lo tienen pensado. El bipartidismo dirigido por manijeros fieles es el mejor de sus negocios. Otro sistema convertiría a España en Venezuela, Irán o algo peor. Ya está la prensa del régimen acojonando a los ancianos y envenenando a los necios. Y ojo: avisando. Ya intentarán que sea cierto.

Si algún día el pueblo tomara las riendas intentarían hacer lo que han hecho siempre: convertir España en un caos. ¿Cómo? Evadirán capitales a mansalva, paralizarán las inversiones internas y externas, harán que suba la prima de riesgo y todos sus parientes, la Europa de los filibusteros nos declarará proscritos, intentarán hundir los mercados, harán lo impensable para que el paro aumente y nadie nos financie; los manijeros movilizarán a su militancia más reaccionaria y promoverán disturbios; sicarios carentes de siglas incendiarán las calles, los medios afines al régimen, y hoy lo son el 80%, manipularán, difamarán, intoxicarán y calentarán a la opinión pública como están haciendo ya; quien gobierne tendrá que recurrir a la Policía para mantener el orden… ¿Lo ven ustedes como esto iba a ser Venezuela? ¡La gente matándose en las calles! ¡Qué disparate! Parece que estoy oyendo clamar a Eduardo Inda, a Rojo, a Marhuenda, a la COPE, a TV13…

No, convertir España en una democracia decente y moderna nos va a costar a los españoles mucho más que ir a las urnas. No es tan fácil ahuyentar a parásitos tan viejos y poderosos, acostumbrados al mando, el robo y la riqueza. Sus manijeros han robado mucho, pero ellos más, y no renunciarán fácilmente a seguir haciéndolo. Los españoles podemos convivir perfectamente con ladrones, lo hemos demostrado, el problema es que estos no tienen fondo y nos comerán hasta las tripas. Ya nos hemos dado cuenta y parecemos dispuestos a desparasitarnos. ¿Podremos?