miércoles, 12 de febrero de 2014

El voto secreto no resquebraja la disciplina del PP en el aborto

 Alberto Ruíz-Gallardón durante la votación para retir el anteproyecto para la reforma de la legislación sobre la interrupción voluntaria del embarazo.
El voto secreto solicitado por los socialistas no ha logrado romper la disciplina interna de los miembros del grupo parlamentario popular a la hora de pronunciarse este martes en el Congreso de los Diputados sobre un asunto tan espinoso como el de la reforma de la actual legislación sobre el aborto, anunciada en un anteproyecto de ley que el Gobierno de Rajoy tiene previsto presentar en sede parlamentaria en fecha todavía desconocida. La diputada popular Celia Villalobos, vicepresidenta primera de la Cámara y contraria a la iniciativa gubernamental, lo ha dejada muy claro antes de la votación: "A nosotros no nos gusta que nos pidan ser traidores".
La originalidad del debate parlamentario sobre la polémica reforma del aborto planteada por el ministro Gallardón ha consistido en la petición de los socialistas para que sus señorías se pudiesen  manifestar mediante el voto secreto sobre la proposición no de ley socialista. Pero, ni por esas. El resultado ha sido el previsto. Fuentes del propio grupo parlamentario popular han confesado a Público que "en todo caso este no es el momento para mostrar una disidencia porque no tiene objeto, y menos a instancias del grupo socialista".
Desde el grupo socialista se admite que no se esperaban grandes novedades con la petición del voto secreto. "Pero hay que mantener la presión en este asunto y el voto por papeleta forma parte de esa presión", añaden a Público diputadas socialistas. En cualquier caso, en la dirección del grupo popular no había preocupación  antes del recuento de papeletas. Miembros de este colectivo estaba más interesado en conocer la trastienda  de la  elección del candidato del PP andaluz que en la propia votación.
El debate en sí aportó los argumentos ya conocidos sobre la reforma del Ejecutivo que preside Rajoy, hoy ausente de este debate y votación por su viaje a Turquía para una cumbre con su homólogo Erdogan. Tal vez por esa razón ningún otro miembro del Ejecutivo ha estado presente en la mayor parte del debate, ni siquiera el titular de Justicia. Minutos antes de la votación se han ido presentando algunos ministros, también Gallardón que ha ocupado su escaño cuando hablaba la portavoz popular, Marta Torrado, quien ha defendido que el anteproyecto "todavía está sometido a revisión"
La portavoz socialista Elena Valenciano, que ha defendido la PNL, exigió la retirada de la iniciativa gubernamental porque, ha asegurado, "ustedes han llegado demasiado lejos". Y ha pedido que desde el grupo popular respondiesen a cinco preguntas que ha planteado sobre la eficacia, la necesidad y la idoneidad de la iniciativa del Gobierno para las mujeres. En su intervención ha argumentado que ninguna de sus interrogantes justifica la reforma anunciada por el ministro Gallardón. Y se ha dirigido directamente a las diputadas de la bancada popular: "Sean libres y déjennos ser libres. No voten como diputadas lo que no votarían como mujeres", ha dicho.
Desde otros grupos parlamentarios - solo los diputados de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), la formación democristiana de la coalición CiU se han pronunciado en contra - se ha criticado, otra vez más, la reforma de la legislación actual. Muy críticas han sido las diputadas Jordá, de ERC, y De las Heras, de La Izquierda Plural. La frase llamativa de la tarde la ha pronunciado la diputada de Amaiur, Onintza Enbeita: "En mi moño y en mi coño, mando yo", ha proclamado.

Dos portadas y una ovación


La caverna mediática refleja toda la caspa del PP en sus portadas tras la votación de ayer en el Congreso sobre la reforma de la ley del aborto. La foto final corresponde a un debate celebrado hace meses en el Senado sobre el aborto, y podría retratar qué tipo de mujer abunda en el Partido Popular.







el ventano
 Los 178 diputados del PP presentes en la sesión han votado en bloque en contra de una iniciativa del PSOE que pedía la retirada de la reforma de la ley del aborto, que ha contado conm 183 votos en contra, 151 a favor y seis abstenciones. Tras la votación, que se ha realizado con papeleta secreta, los parlamentarios del PP han aplaudido el resultado.

Según el reglamento del Congreso, "la votación será pública por llamamiento o secreta cuando así lo exija este reglamento o lo soliciten dos grupos parlamentarios o una quinta parte de los diputados o de los miembros de la comisión", siempre que no se trate de un procedimiento legislativo.

El argumentario del Partido Popular lo resume perfectamente esta intervención: "Se pongan como se pongan, el aborto es matar a un ser humano. Es que es ser un terrorista". Con estos profundos argumentos ha defendido la reforma de la ley del aborto de Gallardón Davinia Saorín, una concejal del PP en el Ayuntamiento de Calasparra, en Murcia.