martes, 25 de diciembre de 2012

se calentó con su empleada y la echó


Imagen ilustrativa.
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En la ciudad de Iowa, el Tribunal Supremo falló a favor de un dentista que tuvo que despedir a su secretaria por ser "irresistible". Además, el cuerpo judicial (integrado sólo por hombres) sacó un dictamen en que anuncian que los jefes pueden dejar sin empleo a sus compañeras de trabajo si observan que son muy atractivas.
En Estados Unidos ser irresistible puede ser motivo de despido, según ha dictaminado el Tribunal Supremo de Iowa, conformado sólo por hombres. El cuerpo judicial falló que un dentista actuó legalmente cuando despidió a una asistente a la que consideraba demasiado atractiva, esgrimiendo que tanto él como su esposa vieron a la mujer como una amenaza para su matrimonio.
De este modo, con 7 votos a favor y ninguno en contra, el tribunal determinó que los jefes pueden despedir a empleadas que vean como una "atracción irresistible", incluso si éstas no coquetean con él, y se comportan de forma irreprochable.
El abogado del dentista Fort DodgeJames Knight, comentó que esta decisión, la primera de este tipo en Iowa, representa una victoria para los valores familiares, ya que Knight despidió a Melissa Nelson para salvar su matrimonio, no porque ella fuera una mujer.
En esta misma línea, el magistrado Edward Mansfield argumentó que tales despidos pueden ser injustos, pero argumentó que no se trata de discriminación ilegal bajo la Ley de Derechos Civiles de Iowa porque son motivados por sentimientos y emociones.
Sin embargo, la abogada de la mujer despedida, Paige Fiedler, opina que la corte de Iowa, que está constituida sólo por hombres, no tiene en consideración la discriminación que afrontan diariamente las mujeres en el lugar de trabajo.
"Estos jueces enviaron un mensaje a las mujeres de Iowa, en el que les dicen que ellos no creen que se pueda responsabilizar a los hombres de sus deseos sexuales y que las mujeres de Iowa son las que tienen que monitorear y controlar los deseos sexuales de sus jefes", argumenta. "Si ellos no los controlan, entonces las mujeres pueden ser despedidas legalmente por esta razón”, concluye.
Nelson, de 32 años, llevaba 10 años trabajando para Knight, que la consideraba una trabajadora ejemplar. Sin embargo, en los últimos meses, su jefe empezó a darse cuenta de que su ropa ceñida lo distraía y en una ocasión le dijo que si sus pantalones tenían una protuberancia, era una señal de que ella vestía de forma demasiado provocadora, según documentos de la corte.