A Tilly Lawless le indignó un artículo de la revista digital Mamamía con motivo del 25 aniversario de la película Pretty Woman, en la que una prostituta conoce a su príncipe encantado con el que acaba comiendo perdices. El artículo denunciaba lo dañino que era el trabajo de prostituta frente a lo que mostraba el film.
Tilly Lawless criticó que la revista generalizaba a las trabajadoras sexuales y hablaba de la prostitución de manera despectiva, como si fuera algo peligroso para las personas que decidían dedicarse a ello.
Tilly, una joven universitaria que lleva dos años trabajando como prostituta, decidió hace unos días colgar en su cuenta de Twitter una foto suya bajo el hashtag #facesofprostitution (Las caras de la prostitución) como forma de protestar por los clichés y los estereotipos con que la prensa aborda la prostitución.
Poco después, la Asociación Australiana de Trabajadoras Sexuales le pidió permiso para utilizar su hashtag, y la red se inundó de cientos de mensajes de trabajadores y trabajadoras sexuales, de Australia en su mayoría, mostrando sus caras por primera vez de manera pública en apoyo a la iniciativa y contra la criminalización de sus profesión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario