Se prendió fuego a sí mismo al verse imposibilitado de disfrutar sus títulos favoritos.
Hsueh Jun-Chen, hombre de 22 años originario de Taiwan, se inmoló después de que su padre le ordenará dejar de jugar videojuegos.
Las cosas sucedieron así; el joven estaba de visita en la casa de sus padres debido a las vacaciones, una de sus actividades recurrentes era jugar algún título online en la noche, molesto por ello; su padre tocó a su puerta y le ordenó que dejara de jugar. Jun-Chen atendió, no sin antes discutir fuertemente con su progenitor; mismo que le mencionó que debía detenerse, pues las clases estaban por reanudarse en su universidad.
Al día siguiente, los padres notaron que su hijo había desaparecido, de manera inmediata pensaron que había ido a dar una vuelta en su motocicleta como regularmente lo hacía; comenzaron a preocuparse cuando vieron que el vehículo seguía en la cochera. Después de una breve búsqueda, encontraron el cadaver de Hsueh en un bosque a unos 300 metros de la propiedad; el joven se habría rociado encima varios botes con gasolina y prendido fuego.
La policía está haciendo las investigaciones pertinentes, tal parece que la discusión acerca de su afición por lo videojuegos fue el detonante para que cometiera el acto; según informan las autoridades, el joven sentía mucha presión por la universidad y el hecho de tener que buscar trabajo después de terminada su carrera.
Con información de Daily Mail.
