En la provincia de Neuquén los muertos no pueden descansar en paz. En el cementerio de El Progreso el lugar disponible no alcanza para todos, y se resolvió habilitar una calle de circulación interna para sepultar cuerpos.
Además, con el propósito de tener más espacio, se intima a los familiares a pagar la tasa municipal. En caso de no hacerlo, su familiar es exhumado y colocado en una bolsa debidamente identificada en donde antes funcionaban los baños públicos. Por día se exhuman cinco cadáveres, para poder disponer de lugar para los dos o tres entierros que se registran cada jornada.
El Progreso es el segundo cementerio municipal de la ciudad, pero sólo dispone libre un triángulo de cinco por seis por cuatro metros de extensión.Según los trabajadores del predio, ese lugar podría ser utilizado en como fosa común, que se sumará a las dos existentes.
A su vez, el sector central  es reducido y debido a la cantidad de tumbas en tierra el espacio entre lápida y lápida para pasar a pie es muy pequeño. Además, los senderos son estrechos y están en algunos lugares ocupados por pequeños bancos o plantas.
En los últimos meses y ante la imposibilidad de contar con tumbas disponibles, las autoridades del cementerio resolvieron avanzar sobre una calle de circulación interna. Allí, ya se enterraron diez cuerpos
Al cementerio se podía entrar en auto y recorrerlo. Sin embargo, eso ya no será posible. “Tuvimos que empezar a sepultar sobre la calle porque no hay más lugar", indicaron trabajadores del predio.
Con el objetivo de contar con más espacio, también se decidió exhumar alrededor de cinco cuerpos por día para liberar las tumbas de contribuyentes que no pagan la tasa municipal.
El municipio neuquino envía a los familiares del fallecido una carta documento intimando a regularizar la situación. En caso que no haya respuesta en el período solicitado, se retiran los restos óseos, y son guardados en bolas con sus respectivas etiquetas identificatorias. Estas bolsas son guardadas en lo "antes funcionaban como baños públicos", indicaron los sepultureros.
En caso que nadie los reclame, son depositados en una fosa común y así se toman nuevos lugares. Por día se realizan entre dos o tres sepulturas.
A pesar de esta situación y que en el otro cementerio municipal también cuenta con falta de espacio, no está previsto la construcción de un nuevo cementerio en la zona.