jueves, 12 de diciembre de 2013

La fiesta que se suspendió por falta de pobres y de niños "subnormales"




Recorte de un periódico de fecha desconocida que recoge la noticia

"En los dos últimos años, a la vista ya del 'déficit' de pobres, se trasladaban los ancianos del Asilo de la capital, y asimismo, fueron invitados los niños acogidos en un Centro de subnormales. Pero como esto último parece que ofrecía dificultades de tipo digestivo a los invitados, se ha decidido suspender la fiesta, y Vargas no celebrará su clásica 'perola', a la que acudían más de doscientos mendigos".

Según cuentan, un mendigo llegó al pueblo contando que en la comarca se había declarado una epidemia de peste que estaba ocasionando numerosas muertes. Los vecinos socorrieron al hombre y le dieron comida y alojamiento. Aquel pordiosero era el mismísimo San Sebastián, y en agradecimiento al trato recibido evitó que la peste llegara a la localidad. Desde entonces, los vecinos de Vargas, en Santander, celebran en su honor la fiesta de 'La Perola', en la que daban de comer a los "pobres de pedir" de toda la zona, hasta que empezaron a escasear. Ahora hacen un cocido como recuerdo del santo y los pobres.