Aún no ha sucedido, pero supongamos que los bárbaros del Estado Islámico hostigan nuestras fronteras en su intento de reconquistar Al Andalus. ¿A quién enviamos, a la temible Legión, a nuestra gloriosa Armada vencedora en Perejil, a un ejército de zombis contagiados con el ébola o a un comando suicida de hipsters de Malasaña? Pues habrá que empezar con estos, han pensado los prebostes del Ministerio de Defensa: que los barbudos se maten entre sí.
Así que ahí tenemos en primera línea del #DiadeTodos (anteriormente conocido como Día de la Hispanidad) a un espécimen de hipster marchando marcialmente por la Plaza de España. Le acompañan otros cinco urbanitas treintañeros, un señor agropecuario bastante trendy, un soldado desarmado estilo oso y cierra la avanzadilla Reyes, el pívot de la selección española llevando el trapo rojigualda.
Pues aviados estamos como estos ocho petimetres tengan que defendernos de las huestes del ISS. ¿Dónde están nuestros rambos, nuestra cabra legionaria, nuestros gárrulos de la sierra y los canis desempleados con sus puños americanos?
Porque, no nos engañemos, para ser el #DiadeTodos la selección que se ha marcado el Ministerio de Defensa es un poco demasiado homogénea: todos de la misma quinta y todos retratados en Madrid, suponemos que por los ajustes en el presupuesto para confeccionar el póster. Nuestros patriotas caminan con paso decidido por la Plaza Mayor (dos), la Plaza de España (el hipster), el puente tubular de Madrid Río, el Parque del Oeste y dos localizaciones de las afueras de Madrid: el embalse del Atazar en horas bajas y un prao de centeno inidentificable, pero 100% castellano.
¿Qué nos tratan de decir nuestros generales con este afiche tan centralista? ¿Será acaso que no es de los moros de los que nos tenemos que defender sino que Madrid es garante de la unidad de España, amenazada por los secesionistas catalanes y vascongados? Eso explicaría que nuestro abanderado fuera Reyes, a modo de toque de atención a los secesionistas hermanos Gasol.
Señores del Ejército, dejen a los jugadores al margen de esto y envíen a las trincheras a Orenga capitaneando a un ejército de hipsters infectados por el ébola. Es un sacrificio que podemos asumir. Es el #DiadeTodos, qué demonios.
El póster lo encontró nuestro coolhunter, Jorge Todolí, cuando salía del Ocho y Medio, donde se estaba documentando para el especial Diez pintas hipster que te harán perder la fe en el género humano, próximamente en sus pantallas estrambóticas.
¡Síguenos en Facetrambotic y en Twitterbotic!
