Cuando Antonio Valero, concejal de festejos de Jumilla, decidió disfrazarse para los carnavales de virgen en procesión, no debió imaginar las consecuencias de su broma.
Según informa La opinión de Murcia, la comunidad eclesiástica de la localidad se ha sentido muy molesta por lo que consideran una irreverencia y una falta de respeto y la Hermandad de Procesiones de Semana Santa asegura que ha herido la sensibilidad de los creyentes.
Por su parte, Velero, se ha visto obligado a dar una rueda de prensa para pedir perdón. Según recoge La Verdad, el concejal ha pedido “disculpas personales, a aquellas personas que se han podido sentir ofendidas con el disfraz, no era la intención, ni se pretendía, fue realizado con mucho cariño, además, todos los que me conocen saben mi profundo amor y pasión por la Semana Santa de Jumilla”.