Su presencia en los medios, y en la vida cotidiana, es cada vez más relevante ya que sus efectos sobre la salud son nocivos: la ansiedad y el estrés. Sin embargo, pocas personas sabemos diferencias entre ambos conceptos, creyendo erróneamente que son iguales.
De acuerdo a una encuesta realizada por la empresa Consulta Mitofksy, los que más estresa a los mexicanos son la inseguridad, la economía y el tránsito.
No son lo mismo y sus efectos tampoco…
De acuerdo con la Secretaria de Salud de México el estrés es la reacción natural y necesaria que incluye una serie de respuestas fisiológicas que preparan al cuerpo para actuar frente a una situación que se percibe como amenazante.
Sin embargo, ¿cuál es la diferencia entre estrés y ansiedad? Aquí te decimos algunas con información de David Spiegel, director asociado de la Universidad de Stanford.
1. El lugar de donde vienen. Con el estrés sabemos lo que nos preocupa, pero con la ansiedad somos menos conscientes de lo que la está produciendo. En este último el problema se encuentra en que uno empieza a sentir ansiedad por estar ansioso.
2. Miedo. La ansiedad es como una bola de nieve. Con el tiempo la ansiedad se convierte en miedo por determinados sentimientos o situaciones. Las personas que la padecen tienden a evitar lo que les produce temor empeorando la situación.
3. Pasado. Las fobias de eventos, actividades o situaciones sociales están arraigados en el terror, provocando que la persona que sufre de trastorno de pánico cuando se enfrentan cara a cara con ese factor se produzca en ellos estrés
4. Factores externos. El estrés suele ser producto del exterior: trabajo, familia u obligaciones.
5. Sentimientos. El estrés que experimentamos en nuestra vida del día a día se asocia a la frustración y nerviosismo, donde la ansiedad a menudo viene de un lugar de miedo, intranquilidad y preocupación.
6. Una origina a la otra. La ansiedad, además de ser una respuesta emocional al estrés, puede ser una reacción emocional de alerta ante una amenaza que puede originarse sin agentes estresantes.
Ya sea que tengas estrés o ansiedad, de acuerdo con Spiegel, ambas pueden acelerar los latidos del corazón, respiración dispersa y tensión muscular. Recuerda que tu salud está en tus manos. ¡No lo olvides!