Las
aspirinas son muy antiguas. La Coca-cola también, y como no podía ser
de otra manera en los años 80 formaba parte de nuestra habitual dieta de
guarrerías, junto con los pastelitos y demás exquisiteces.
Los que éramos niños en los 80
hemos oído infinidad de veces por parte de nuestras madres, abuelas y
vecinas varias que no se podían tomar aspirinas y Coca-cola a la vez. Te
lo soltaban con una simple y demoledora sentencia:
"La Coca-cola mezclada con una aspirina es droga"
Hay que tener en cuenta que en
los años 80 la palabra "droga" iba casi exclusivamente asociada al
típico yonki con jeringuilla y era un tema bastante tabú. Y claro, nos
acojonaban.
Afortunadamente, hoy se sabe que
si te tomas una aspirina con una Coca-cola no pasa absolutamente nada.
Como mucho lo que puede ocurrir es que la aspirina te haga efecto antes
por la cafeína que lleva la Coca-cola (de hecho, muchos analgésicos
llevan cafeína, incluso existe la Cafiaspirina), o que te siente mal al
estómago, pero no te vas a morir ni te vas a volver yonki.