El sujeto respondió a las ordenes de su "maestro" y se sometió a un peligroso procedimiento para agrandar sus genitales pero comenzó a hincharse más de lo normal. Debido a la gran cantidad de sustancia que ingresó al cuerpo, falleció al poco tiempo.
Se trata del australiano Jack Chapman, de 28 años que murió en Seattle, Estados Unidos luego de inyectarse grandes cantidades de silicona en los genitales. La sustancia ingresó al torrente sanguíneo y murió.
La causa de la muerte de Chapman fue identificada como "síndrome de inyección de silicona" y estaba listado como una de las cuatro causas de su muerte, así como tres causas relacionadas con problemas pulmonares.
El seudónimo del australiano era "Tank Hafertepen" y había publicado fotos de sí mismo con una hinchazón anormal pero orgulloso de ella. Las inyecciones de este tipo pueden conducir a la acumulación de líquido y al sangrado en los pulmones. Todo fue un pedido de su "maestro".
Chapman estaba en una relación homoerótica de maestro-esclavo y vivía en una familia poliamorosa de cinco "cachorros" que eran sumisos al " Maestro" Dylan Hafertepen. Cada "cachorro" tenían candados en sus collares y tatuajes que se declaraban "Propiedad del Maestro Dylan".
Jack publicó un contrato de sus supuestos acuerdos de relación con el Sr. Hafertepen que le prohibía usar desodorante, masturbarse, mirar televisión o reunirse con amigos sin el permiso del maestro. Además, tenía que darle cheques de pago y le pedía que se arrastre.
La madre de Chapman, Linda, culpó Dylan por la muerte de su hijo. Además, admitió que la relación era abusiva y tóxica: “Sé que mi hijo tenía libre albedrío, pero no estaba en su estado de ánimo correcto. Era devoción, era como una especie de clan, familia, como un culto. Y para demostrarle su devoción tenían que cambiar sus cuerpos".
"No tenía autoestima, se había perdido en este culto", añadió y aclaró que en 2017 intentó dejar a su maestro pero regresó al mes siguiente.
Tras la muerte de Chapman, Dylan publicó: "Si Tank era mi mundo, yo era su sol; me hacía sentir como el centro de su universo".
Uno de sus compañeros afirmó su muerte se debido a "una enfermedad pulmonar no diagnosticada previamente", pero los registros médicos muestran que esto no es cierto.
La causa de la muerte de Chapman fue identificada como "síndrome de inyección de silicona" y estaba listado como una de las cuatro causas de su muerte, así como tres causas relacionadas con problemas pulmonares.
El seudónimo del australiano era "Tank Hafertepen" y había publicado fotos de sí mismo con una hinchazón anormal pero orgulloso de ella. Las inyecciones de este tipo pueden conducir a la acumulación de líquido y al sangrado en los pulmones. Todo fue un pedido de su "maestro".
Chapman estaba en una relación homoerótica de maestro-esclavo y vivía en una familia poliamorosa de cinco "cachorros" que eran sumisos al " Maestro" Dylan Hafertepen. Cada "cachorro" tenían candados en sus collares y tatuajes que se declaraban "Propiedad del Maestro Dylan".
Jack publicó un contrato de sus supuestos acuerdos de relación con el Sr. Hafertepen que le prohibía usar desodorante, masturbarse, mirar televisión o reunirse con amigos sin el permiso del maestro. Además, tenía que darle cheques de pago y le pedía que se arrastre.
La madre de Chapman, Linda, culpó Dylan por la muerte de su hijo. Además, admitió que la relación era abusiva y tóxica: “Sé que mi hijo tenía libre albedrío, pero no estaba en su estado de ánimo correcto. Era devoción, era como una especie de clan, familia, como un culto. Y para demostrarle su devoción tenían que cambiar sus cuerpos".
"No tenía autoestima, se había perdido en este culto", añadió y aclaró que en 2017 intentó dejar a su maestro pero regresó al mes siguiente.
Tras la muerte de Chapman, Dylan publicó: "Si Tank era mi mundo, yo era su sol; me hacía sentir como el centro de su universo".
Uno de sus compañeros afirmó su muerte se debido a "una enfermedad pulmonar no diagnosticada previamente", pero los registros médicos muestran que esto no es cierto.
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