Una maestra se defendió a mordiscos y le arrancó la lengua a un adolescente de 16 años que irrumpió en su casa e intentó violarla en Carolina del Sur, Estados Unidos
Paige Duvall, de 33 años, fue abordada por Antoine Miller, de 16, cuando estaba en la entrada de su casa ubicada en la Avenida Sumner de la localidad de North Charleston, informó el sitio Live5News. Tras un forcejeo con el muchacho, la mujer logró morderlo y le arrancó la lengua.
La mujer explicó que alguien le tocó la puerta en tres intentos y que al salir la última vez se encontró con Miller, que estaba armado con un cuchillo.
La víctima reveló que Miller logró empujarla hacia el interior de su casa, la tiró al suelo y la golpeó varias veces antes de arrastrarla a la cocina. La mujer logró darle una patada en la entrepierna al agresor, quien a su vez le metió la lengua en la boca.
"Le mordí la lengua tan fuerte como pude hasta que escuché que algo sonaba", reveló Duvall, quien escupió la lengua del agresor en el piso de la cocina de su casa.
El adolescente se escapó tras la mordida y se refugió en el local de Waffles desde donde su madre llamó al 911 porque su hijo estaba sangrando y sin lengua.
Paige Duvall, de 33 años, fue abordada por Antoine Miller, de 16, cuando estaba en la entrada de su casa ubicada en la Avenida Sumner de la localidad de North Charleston, informó el sitio Live5News. Tras un forcejeo con el muchacho, la mujer logró morderlo y le arrancó la lengua.
La mujer explicó que alguien le tocó la puerta en tres intentos y que al salir la última vez se encontró con Miller, que estaba armado con un cuchillo.
La víctima reveló que Miller logró empujarla hacia el interior de su casa, la tiró al suelo y la golpeó varias veces antes de arrastrarla a la cocina. La mujer logró darle una patada en la entrepierna al agresor, quien a su vez le metió la lengua en la boca.
"Le mordí la lengua tan fuerte como pude hasta que escuché que algo sonaba", reveló Duvall, quien escupió la lengua del agresor en el piso de la cocina de su casa.
El adolescente se escapó tras la mordida y se refugió en el local de Waffles desde donde su madre llamó al 911 porque su hijo estaba sangrando y sin lengua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario