Ellen DeGeneres cambió el juego de las selfies en la pasada entrega de los Oscar, pero la práctica de estirar la mano y tomarse una fotografía ha evolucionado desde entonces.
Sopitas
Hoy, las ganas de auto-fotografiarse para ganarse algunos likes en Facebook, han llevado a todos extremos como escalar edificios y colgarse de una orilla para la selfie, aventarse en paracaídas con su smartphone o hasta el uso de selfie-sticks.
Como para variar un poco, les tenemos 5 selfies que nos demuestran que la gente haría de todo por un poco de fama en la red… ¡Genial!
Vértigo
Sólo vean la mirada de ese intrépido muchacho, sin duda está pensando “…Tal vez esto no vale la pena”, pero sí lo vale, amigo. Sí lo vale. Imaginen todo el valor que necesitó el chavo para escalar ese edificio y sólo para tomarse su selfie.
Selfie redentora
El valiente sujeto de esta selfie se llama Lee Thompson, en esta ocasión decidió treparse a los hombros del Cristo Redentor en Río de Janeiro, estatua que mide 38 metros de altura, además de los 8 que tiene su pedestal. Un paso en falso y no la cuenta.
¡Vuela, vuela!
Nosotros no podemos tomarnos una selfie andando en bicicleta… Vaya, ni siquiera caminando y este sujeto lo hace mientras pilotea su avioneta como si fuera cualquier cosa. Sobra decir, niños, que no se tomen selfies mientras están manejando algún vehículo.
Selfie sobre las olas
Miren la cara de determinación de este sujeto, uno puede leer en su mirada que está a punto de estrellarse, pero sabe que tiene una gran selfie; es todo lo que busca.
Surfing Selfie Fail
Nada que esconder, este muchacho sabe que su destino está sellado y que no hay escapatoria. Fracasó como surfista, pero cuando menos nos regaló una foto dentro de una ola. Se necesita arte para lograrlo.
Como para variar un poco, les tenemos 5 selfies que nos demuestran que la gente haría de todo por un poco de fama en la red… ¡Genial!
Vértigo
Sólo vean la mirada de ese intrépido muchacho, sin duda está pensando “…Tal vez esto no vale la pena”, pero sí lo vale, amigo. Sí lo vale. Imaginen todo el valor que necesitó el chavo para escalar ese edificio y sólo para tomarse su selfie.
Selfie redentora
El valiente sujeto de esta selfie se llama Lee Thompson, en esta ocasión decidió treparse a los hombros del Cristo Redentor en Río de Janeiro, estatua que mide 38 metros de altura, además de los 8 que tiene su pedestal. Un paso en falso y no la cuenta.
¡Vuela, vuela!
Nosotros no podemos tomarnos una selfie andando en bicicleta… Vaya, ni siquiera caminando y este sujeto lo hace mientras pilotea su avioneta como si fuera cualquier cosa. Sobra decir, niños, que no se tomen selfies mientras están manejando algún vehículo.
Selfie sobre las olas
Miren la cara de determinación de este sujeto, uno puede leer en su mirada que está a punto de estrellarse, pero sabe que tiene una gran selfie; es todo lo que busca.
Surfing Selfie Fail
Nada que esconder, este muchacho sabe que su destino está sellado y que no hay escapatoria. Fracasó como surfista, pero cuando menos nos regaló una foto dentro de una ola. Se necesita arte para lograrlo.