El Ministerio de Defensa ha prohibido a los militares de alto rango tener relaciones sexuales con mujeres rusas o chinas, ante la posibilidad de que se trate de espías que busquen obtener información reservada en la confidencialidad que suele ofrecer la cama.
Un documento filtrado, denominado Manual de Seguridad del Ministerio de Defensa, advierte de que ha detectado a agentes femeninas del FSB, el servicio de inteligencia de Rusia y sucesor de la KGB de la era soviética, con especiales habilidades para la seducción, según publicaba este domingo el Daily Mail.
El manual señala que estos métodos, que denomina "trampas de miel", siempre han sido muy empleados por los servicios secretos de todo el mundo, y la intención del escrito es evitar que los mandos bajen la guardia ante maniobras que utilizan la "infidelidad conyugal" como forma de chantaje para obtener información valiosa del funcionario.
Un militar de alto rango relató hace unos días al Sunday Times que una mujer rubia muy atractiva de unos 30 años de edad se acercó a él en un hotel de San Petersburgo y le comentó que le gustaban mucho los coches deportivos británicos. El oficial añadió que la abandonó al sospechar de sus verdaderas intenciones.
Para el ministerio británico, las mujeres chinas pueden llegar a ser más peligrosas que las rusas. El motivo, según dice el manual, es que la inteligencia china tiene un "apetito voraz, vasto e indiscriminado" por todo tipo de datos valiosos procedentes de Occidente.
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No están contrastados los rumores que señalan que el PP podría estar redactando un manual parecido destinado a sus parlamentarios para que vigilen con quién se lían en sus viajes por España a costa del erario público, especialmente cuando van a las islas, donde las tentaciones son mayores.