Hoy vamos a hablar de una noticia de esas que has de leer dos o tres
veces antes de darte cuenta de que es una realidad, bueno, en este caso por
cuatro ocasiones tuve que leer la noticia, y verificarla en otros medios.
Muchos ya sabréis a que noticia me refiero, y es que todos los medios de
comunicación se han hecho eco de los cambios que el Instituto Nacional de
Estadística va a introducir en el cálculo del Índice del Producto Interior
Bruto (PIB), por indicación de la Unión Europea a fin de homogeneizar su
cálculo en todos los países de la Unión. Resulta que en la determinación del
PIB se van a incluir los datos relativos al negocio de la prostitución, el
narcotráfico o el contrabando, entre otros. Sí, lo que estáis leyendo. Y dicen
que en virtud de esta modificación el PIB de nuestro País aumentará hasta en un
4,5 %.
Es decir, en el cómputo de la riqueza nacional se tendrán en cuenta los negocios del narcotráfico y de la prostitución, actividades ilícitas pero que van a ser utilizadas para que nuestros gobernantes se pongan la correspondiente medalla, y sino al tiempo. Lo que no entiendo es por qué hay tanta hipocresía, ¿por qué no legalizan las drogas y la prostitución directamente?, porque no veo justo que para unos aspectos sí se tenga en cuenta pero para otros sea perseguido por la Justicia. Si las señoras putas, por ejemplo, van a contribuir de esta forma a mejorar la riqueza Nacional, ¿por qué no tienen derecho a cotizar a la Seguridad Social y a contar con derechos laborales?, creo que sería lo justo y lo procedente.
Y además, incluir estos aspectos en la contabilización de la riqueza
puede conllevar otra serie de problemas o situaciones curiosas, porque si
extrapolamos estos datos a una ciudad, por ejemplo, se podría dar la paradoja de
que barrios en los que se llevan a cabo servicios de prostitución o se trafica
con drogas verían aumentar su riqueza de una forma importante, convirtiéndose
en zonas muy prósperas de ese municipio.
Creo, por lo tanto, que la Unión Europea se ha equivocado, o algo se
legaliza en todos sus aspectos o no se puede “legalizar” solo para aquello que interesa.
No puede ser que las meretrices, las drogas y el contrabando solo cuenten para
la estadística.