José Manuel García Margallo |
El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, fue intervenido el pasado fin de semana de herniorrafia, liposucción y abdominoplastia en un hospital público de Madrid. Lo más grave no es que se saltara la lista de espera, sino que dos de esas operaciones no figuran en la cartera de servicios sanitarios públicos y solo se hacen en la privada.
El pasado viernes ingresó en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid un paciente bajo el epígrafe 'Paciente Protegido-Protegido', quien supuestamente iba a someterse a una operación de quirúrgica rutinaria, aunque fue alojado en una zona cerrada y sin dotación (URPA), para lo que hay que pagar a un intensivista 24 horas extras de guardia y mover a personal de enfermería.
Curiosamente, el ministro no fue operado en el quirófano de cirugía general y digestivo, sino en uno que comparte varias especialidades, entre ellas cirugía plástica, suspendiendo para ello una operación programada con anterioridad a un paciente de otorrinolaringología.
La intervención, que oficialmente se realizaba a causa de una hernia abdominal, se amplió a una abdominoplastia (reducción de grasa en el abdomen) y una una liposucción, que no figuran en la cartera de servicios sanitarios públicos y de las que ningún ciudadano puede beneficiarse en la sanidad pública.
A pesar de diversas informaciones que han circulado por las redes sociales, lo medios de comunicación convencionales se han limitado a publicar que al ministro le han realizado una "operación quirúrgica menor'. García Margallo fue dado de alta el pasado jueves.
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