viernes, 22 de noviembre de 2013

50 aniversario de la muerte de JFK,

El 25 de noviembre de 1963, tres días después de su muerte, el cuerpo de John Fitzgerald Kennedy fue enterrado en el cementerio de Arlington. El periodista Jimmy Breslin, que cubría el funeral para el New York Herald Tribune, decidió contar la historia desde otro punto de vista y hablar con los enterradores (leer la crónica). “Ahora vendrán a ponerlo justo aquí, en esta tumba que estoy haciendo”, le contó uno de ellos. “Sabes, es un honor encargarme de esto”. La crónica es un ejemplo de que a veces hay una buena historia detrás de los focos. Hoy, en el 50 aniversario de la muerte de JFK, he querido fijarme en unos cuantos detalles menores de aquel asesinato que sirven para entender un poco mejor la historia.

1. El banquete vacío, el discurso no pronunciado

La comitiva que acompañaba a Kennedy por las calles de Dallas el día de su asesinato se dirigía aquella mañana al Trade Mart, donde le esperaban unas 2.000 personas*. Durante muchos minutos, y ante el retraso del presidente, la multitud se empezó a agitar. En esta grabación se ven algunas de las escenas, aunque el audio está entrecortado. En esta crónica se recoge el testimonio de gente que estaba allí y no pudo escuchar aquellas palabras nunca pronunciadas. El discurso de Kennedy aquella mañana terminaba así: "Si dios no cuida la ciudad, los vigilantes velan en vano".
La comitiva presidencial también tenía previsto acudir esa noche al Auditorio Municipal de Austin, donde habría una cena benéfica. Como cuentan en Slate, cada uno de los comensales pagó 100 dólares por un banquete que nunca se celebró. La foto muestra la sala vacía a la que JFK nunca llegó:



2. Lo que ganó Zapruder por la película

La historia del asesinato de Kennedy y su impacto sobre los ciudadanos probablemente no habrían sido iguales si la mañana de aquel 22 de noviembre de 1963 el fabricante de ropa para mujeres Abraham Zapruder no hubiera estado allí filmando la escena con un pequeña Bell & Howell 414 de 8 milímetros. Pese a lo que podemos pensar, la grabación no fue conocida por el público hasta 1968, y a partir de momento se ha revisado fotograma a fotograma hasta ser quizá el metraje más visto y repetido de la historia. Hace unas semanas, se publicó esta versión estabilizada y panorámica de la grabación, que permite hacerse una idea mucho más aproximada de qué sucedió en aquella calle de Dallas:



En las horas que siguieron al magnicidio, Zapruder reveló la película y mandó hacer tres copias. Dos fueron entregadas una al Servicio Secreto y la otra al FBI. Por la tercera pelearon, chequera en mano, varios medios de comunicación y finalmente fue Richard Stolley, director de la revista Life en la costa oeste, quién logró el histórico documento. En una entrevista reciente, Stolley -85 años- aseguraba que ver la película y el tristemente célebre fotograma 313 –en el que se recoge el estallido del craneo del presidente fruto de la tercera bala- fue “el momento más dramático” de su carrera. Time pagó un total de 150.000 dólares a Zapruder y le prometió no publicar nunca el fotograma 313, el disparo fatal –el primero impactó en la carretera; el segundo en la garganta del mandatario-. En 1999, el Gobierno de EEUU acordó comprar la película a la familia del emigrante ruso por más de 16 millones, película que hoy se guarda en una sección de los Archivos Nacionales radicada en College Park, Maryland, a las afueras de Washington.
3. La X borrada

Sobre el lugar exacto donde Kennedy recibió el disparo fatal, alguien pintó hace años un X blanca en el asfalto. Ahora, como cuentan mis compañeros de lainformacion.com, esa X no está.

"Era la 'X' más famosa de la historia. Sobre el pavimento de la calle Elm, a su paso por la Plaza de Dealey, una cruz blanca se había convertido en lugar de peregrinación para miles de turistas y amantes de las teorías de la conspiración. Ahora, esa 'X' ya no existe [...] Los culpables de su eliminación son las obras que el ayuntamiento de Dallas está realizando en la calle Elm para "nivelar las calles y eliminar los peligros a la hora de acercarse a la marca" [...] ...los turistas no han dudado nunca en jugarse el tipo para cruzar la calle y hacerse una foto junto al lugar donde Lee Harvey Oswald, supuestamente, voló la cabeza de JFK".

4. El primer telegrama con la noticia


En el momento de los disparos, el periodista de Associated Press James Altgens se encontraba en la zona y fue tstigo directo. Llamó a la oficina de Dallas y éste fue el telegrama que la agencia distribuyó por toda su red y que dio la noticia al mundo. Hoy en día, sería algo así como el primer tweet. tenéis todos los telegramas en The Atlantic (***detalle añadido a posteriori gracias a Disconubes vía MNM)

5. El hombre del paraguas

De entre todos los detalles que investigaron los teóricos de la conspiración, la presencia de un hombre con un paraguas abierto en un día tan despejado dio pie a todo tipo de especulaciones. Como contábamos en Fogonazos, la verdad es a veces más retorcida que nuestra imaginación. No os perdáis la explicación de John 'Tink' Thompson:
 6. El vestido de Jackie

Lo cuenta Eduardo Suárez en El Mundo:

Los trajes del presidente y la primera dama se conservan en la sede central de los Archivos Nacionales en College Park (Maryland). El conjunto rosa de Jackie está todavía ensangrentado en una habitación especial donde el aire se cambia seis veces por hora y siempre hay un 40% de humedad. Por decisión de su hija Caroline, el traje no se podrá mostrar en público al menos hasta 2103. Un extremo que concuerda con la actitud de la familia Kennedy en relación con otros objetos ligados al magnicidio. 

7. La autopsia 


Horas después de su asesinato, los médicos del Hospital Naval de Bethesda, en Maryland, examinaron su cuerpo y realizaron la autopsia. Durante mucho tiempo, las fotografías y radiografías del cadáver y otras pruebas han permanecido en el más estricto secreto. Como cuentan en Smithsonian, este pequeño dossier en el que se resumen la autopsia es el único documento disponible de manera oficial, con un esquema de la trayectoria de las balas realizado por los médicos. Puedes verlo completo en este PDF (descargar). Los documentos completos de la autopsia siguen sin hacerse públicos oficialmente, aunque se han filtrado las fotografías y esquemas por diferentes medios.