Así le dejaron parte de los muebles al anfitrión.
Un adolescente realizó un evento a
través de su cuenta en la red social. Pero se olvido que la invitación
la podían ver todos y asistieron cerca de 600 personas. Parte de los
invitados le destrozaron la vivienda. No te pierdas la galería de imágenes.
Christopher, un joven pirata de 17
años, organizó una fiesta a través de Facebook. Había invitado a 60
personas, pero no se dio cuenta que la invitación fue vista por todos y
al evento asistieron más de 600. Los intrusos le destrozaron la casa y
los daños se estiman en 15 mil libras (24 mil dólares).
Lo último que le había dicho la madre antes de irse de vacaciones fue "no hagas ninguna fiesta". Él no la escuchó y le rompieron toda la casa ubicado en uno de los mejores barrios de Londres en un hogar valuado en 1.1 millones libras (más de 1.600 millones de dólares).
Cuando la policía llegó al lugar tuvo que dispersar a 600 jóvenes. Mientras tanto, la madre asegura que si hubiese tardado más tiempo en llegar se hubiera quedado sin hogar.
"Todos los padres deberían saber que esto es lo que podría pasarles si se van y dejan a su hijo de 17 años solo", dijo la madre, llamada Catherine Seale. "Lo último que le dije antes de irme fue 'no hagas ninguna fiesta", agregó.
Incluso contrató un cuidador, a quien le pagó 60 libras (94 dólares), pero como lo hizo en adelantado el hombre se fue cuando la fiesta comenzó.
"Había sangre en toda la alfombra y un graffiti en uno de los cuartos", dijo su madre.
Lo último que le había dicho la madre antes de irse de vacaciones fue "no hagas ninguna fiesta". Él no la escuchó y le rompieron toda la casa ubicado en uno de los mejores barrios de Londres en un hogar valuado en 1.1 millones libras (más de 1.600 millones de dólares).
Cuando la policía llegó al lugar tuvo que dispersar a 600 jóvenes. Mientras tanto, la madre asegura que si hubiese tardado más tiempo en llegar se hubiera quedado sin hogar.
"Todos los padres deberían saber que esto es lo que podría pasarles si se van y dejan a su hijo de 17 años solo", dijo la madre, llamada Catherine Seale. "Lo último que le dije antes de irme fue 'no hagas ninguna fiesta", agregó.
Incluso contrató un cuidador, a quien le pagó 60 libras (94 dólares), pero como lo hizo en adelantado el hombre se fue cuando la fiesta comenzó.
"Había sangre en toda la alfombra y un graffiti en uno de los cuartos", dijo su madre.