La drámatica situación se registró en Reino Unido, donde este matrimonio realizó un conmovedor duelo. Allí, los padres de una beba necesitaron un tiempo para despedir a la criatura que murió a las cuatro semanas de nacer, ya que padecía una malformación en los cromosomas.
Una madre del Reino Unido compartió esta semana cómo fue el duelo después de perder a su hija, que murió a las cuatro semanas de nacer a raíz de una serie de alteraciones genéticas.Charlotte Szakacs, de 21 años, y su marido Attila, de 28, despidieron a su hija Evlyn durante 16 días en los que la tuvieron con ellos en un hospicio de Leeds, en el Reino Unido.
La pareja elaboró su duelo con su hija acomodada en una cuna refrigerada proporcionada por el hospital y hasta la llevaron a una plaza un par de veces. Luego de 12 días pudieron llevarse a Evlyn a su hogar y cuatro días después realizaron su funeral.
La beba había nacido el 13 de diciembre del año pasado con un peso de 2,4 kilos, pero los médicos no le dieron mucho tiempo de vida porque en la semana 20 de gestación le detectaron una malformación en los cromosomas.
Evlyn nació con el cerebro liso, vías respiratorias atrofiadas y una aorta demasiado angosta, pero vivió hasta el 10 de enero de 2017. Pasó varias semanas con un respirador, sondas y vías en el hospital hasta que sus padres tomaron una difícil decisión.
"Evlyn fue trasladada al hospicio el 10 de enero y nunca la vi tan calmada. Pudimos acunarla y acariciarla bien por primera vez durante una hora hasta que apagaron el ventilador", expresó la madre.
"Sé que no es la mejor opción para todas las personas pero para nosotros era muy importante tener ese rato como familia y poder mimar a nuestra hijita", agregó.
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