'Disculpe que no me levante'. Este es el epitafio que durante mucho tiempo se dijo, erróneamente, que aparecía en la lápida de Groucho Marx. Aunque quizá no tan originales, otras tumbas muestran mensajes curiosos que invitan a la sonrisa en este Día de Difuntos, 2 de noviembre, en medio de tanta mafia que anda por el mundo de los vivos.
A un matemático amante de los sudokus |
'Nunca mató a un hombre que no mereciera morir' |
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