Las mujeres sabemos que nuestro flujo vaginal varia según la época del ciclo menstrual y es el principal indicador si algo no está funcionando como debería.
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Pero, ¿qué es un flujo normal? Una conoce su propio flujo vaginal,
sabes qué color y olor tiene, pero ¿cómo saber si es normal si nunca
hemos visto el de otra persona?
Flujo más fértil. 12 horas
antes y 12 horas después de tu ovulación debes presentar un flujo
parecido a la clara del huevo crudo. Es el flujo más fértil, su
consistencia permite que los espermas viajen hasta dentro del cuello del
útero y puede estirarse hasta 5 cm (dependiendo del cuerpo de cada
quién) sin romperse.
Flujo acuoso. Este flujo
vaginal podría asemejarse a un poco de orina, es más acuoso y moja un
poco tu ropa interior; es de color claro y gotea si lo tomas entre tus
dedos. Este es el segundo mejor para que naden los espermas, si estás
buscando embarazarte este es tu segundo aliado (después de la clara de
huevo).
Flujo cremoso. Este es el
más notorio de todos y puede llegar a manchar tu ropa interior. Cuando
tenemos este tipo de flujo somos poco fértiles pues imposibilita el paso
de los espermas. Es de color banco o amarilloso claro y se parece un
poco a una crema para el cuerpo.
Flujo grumoso. Este flujo es
transparentoso o blancuzco, es espero y tiene grumos. Este es el menos
fértil de todos y su textura es parecida a una pasta o al pegamento.
Para revisar tu flujo y saber cuándo
necesitas usar panti protectores puedes fijarte en lo que queda en el
papel de baño después de limpiarte o usando tu dedo índice limpio (de
preferencia después de bañarte) e introducirlo en tu vagina.
Es importante que todas conozcamos cómo
funciona nuestro cuerpo y podamos darnos cuenta de las infecciones o de
los cambios que puede experimentar.