Una jueza de la Corte Suprema de Bosnia estuvo a punto de perder su trabajo luego de ser captada desnuda en su oficina.
Las imágenes, publicadas en los medios locales, desataron la polémica y provocaron una investigación de las autoridades, que en un principio decidieron apartar de su cargo a Bilajac.
La comisión disciplinaria de la Corte Suprema había determinado que el comportamiento de la jueza había dañado la imagen de la institución.
Sin embargo, la mujer argumentó que su oficina estuvo cerrada con llave en todo momento y que su sesión de ejercicios había sido autorizada con anterioridad.
Finalmente, la Corte Suprema concluyó que la magistrada no había actuado incorrectamente y que sus acciones no habían afectado su credibilidad profesional, por lo que su puesto le fue restituido.