La Ouija tiene un origen un tanto impreciso. Los primeros que utilizaron un aparato similar eran los egipcios con un anillo de piedra que se sostenía con un hilo sujeto por alguien. También se dice que en el año 540 A. C Pitágoras inventó un artefacto que consistía en una tabla provista de ruedas y que con el movimiento generaba mensajes, algo parecido a la planchett. O que en China, en el 500 A.C, contaban con un aparato similar.
Finalmente, sería en 1980 cuando se crearía la primera patente. El 28 de mayo de 1980, Elijah J. Bondo se declaró inventor de la primera Ouija pero reconociendo como titulares de la misma a William H. A. Maupin y Charles W. Kennard. En realidad no se sabe a ciencia cierta quién de los tres la creó.
Posteriormente la patente fue vendida a William Fuld, antiguo empleado de Kennard, cuya compañía comercializó la tabla hasta que Parker Brothers, la compañía que creó el Monopoly, Cluedo o el Trivial Pursuit, adquirió los derechos en 1966.