0 2014
Córdoba y Mayo
Aun no ha empezado el mes de Mayo pero Córdoba ya luce como si lo fuera. Bastaría con salir a dar un paseo, y si bien el olor a azahar se ha ido disipando de nuestras calles, la ciudad, muestra sus mejores galas a propios y extraños con la sencilla idea de cautivar a todo al que se atreva a descubrirla.
Al menos es lo que siento, y eso es lo que me dicen aquellas personas que desde fuera han oído hablar del Mayo cordobés. Movidos por su curiosidad, deciden acercarse hasta nuestra milenaria ciudad para ver que es realmente lo que aquí ocurre por estas fechas. Algunos han conocido de cerca la antesala del mes por excelencia de Córdoba con la celebración de la “Cata del Vino”, pero otros seguro que están deseando que pasen los días para llegar a nuestra Córdoba y ver de cerca, sus cruces, sus patios, su feria.
Hoy precisamente, de camino a casa he sentido esa bonita sensación que puede experimentar el forastero cuando descubre alguno de esos maravillosos rincones que esconde Córdoba. Bajaba por la conocida como Puerta del Rincón, y observo a un grupo de personas en torno a lo que intuía sería un monumento más promovido desde el Ayuntamiento. Mi sorpresa llegaría al descubrir que realmente lo que se ha hecho ha sido homenajear eso que es tan nuestro como los patios cordobeses. Junto al antiguo torreón defensivo de la muralla, se ha creado este pintoresco rincón en el que ya posa la primera de las esculturas del conjunto; para el resto habrá que esperar. Su autor, paisano nuestro, José Manuel Belmonte, autor de otras obras en la ciudad como el monumento a la mujer cordobesa en la plaza de Colón o el dedicado a Juan de Mesa junto a la iglesia de San Pedro entre otras. Así es Córdoba, así es su arte y así es su mes de Mayo.