Fue conocido como el verdadero "Slumdog Millonaire" después de convertirse en la primera persona en ganar la versión india del programa "¿Quién quiere ser millonario?"
Al igual que el héroe de la película ganadora del Oscar, Sushil Kumar utilizó su ingenio para ganar una fortuna. Pero un año después, su vida ha cambiado muy poco."Este es mi generador", dice sonriendo y exhibe su compra de US$500. "Tenemos cortes de energía de hasta cuatro horas cada día. Antes no podía ver las noticias ni mis programas favoritos de televisión, pero ahora que tengo esto, no hay más problemas".
De hecho, fue su programa de televisión favorito el que le permitió a Sushil Kumar entrar al club de los millonarios de India.
Hace un año, el mundo vio cómo este empleado de una oficina de gobierno de Bihar, uno de los estados más pobres de India, se convirtió en el primer concursante en llevarse el premio mayor de 50 millones de rupias (un millón de dólares) en "¿Kaun Banega Crorepathi?" ("¿Quién quiere ser millonario?")
Antes de su aparición en el programa, Sushil, licenciado en psicología, ganaba poco más de US$100 al mes. Luego de contestar correctamente 13 preguntas, embolsó más de lo que habría ganado en 800 años.
La historia fue noticia en todo el mundo porque era casi idéntica a la trama de la película "Slumdog Millionaire", donde un joven de origen humilde tiene un golpe de suerte en ese mismo concurso. En la película uno no sabe cómo el dinero le cambia la vida al héroe, aunque da la sensación de que va a ejercer una gran transformación.
Compras
El hogar familiar es muy básico. Cada una de las cuatro habitaciones tiene una cama de matrimonio y en la esquina de una de ellas hay un pequeño televisor. Es aquí donde vive con su esposa, su madre y su padre, cuatro hermanos, dos cuñadas y un niño. En total, once personas."Debido a que vivimos en una ciudad muy pequeña, mis problemas económicos se han resuelto en un 100%", dice. "Creo que es un milagro. Es una bendición de Dios".
Sentado con las piernas cruzadas en la cama, Sushil me muestra otra de sus compras: su primera computadora, una pequeña tableta. La semana pasada se compró una moto, el único vehículo de su propiedad, a pesar de que tiene suficiente dinero como para adquirir varios coches deportivos de alta gama.
Al preguntarle por qué no hizo gastos más extravagantes, su respuesta es: "Poco a poco, estoy gastando mi dinero con cuidado".
La mayor parte de esa suma fue destinada a comprar una parcela de tierra al lado de su casa, donde está construyendo una casa de nueve habitaciones para la familia entera. "Cada habitación tendrá un cuarto de baño privado", dice con orgullo mientras me muestra el sitio.
Cartas
Sushil dice que el dinero lo ha cambiado de maneras simples y pequeñas. Pagó las deudas de un hermano, compró algunas joyas para su esposa y puso el resto en el banco.India es un país conocido por su cultura del ahorro, y Sushil parece dar con el estereotipo. Ha pedido algunos consejos financieros acerca de cómo invertir el dinero y también recibió muchas ofertas de gente que quería gastarlo por él.
"Desde que gané, mucha gente comenzó a mandarme cartas pidiéndome dinero, para comprar tierras, para resolver sus problemas, para pagar operaciones, su casa, la boda de sus hijos".
Pero Sushil adopta una línea firme ante esas cartas de súplica.
"En nuestra sociedad si ayudas a uno miles de personas empiezan a llegar y a decir que también son necesitados", dice.
"Un millón es mucho dinero, pero no es suficiente si empiezas a ayudar a la gente, perderías todo en un día".
El dinero, sin embargo, le ha permitido Sushil a renunciar a su trabajo.
En el momento de su victoria, Sushil dijo que había adquirido gran parte de su cultura general gracias al servicio en hindi de la BBC. Sigue siendo un consumidor voraz de noticias. Ahora pasa su tiempo viendo documentales y leyendo libros recién comprados.
"Me gustaría ser profesor psicología algún día", dice. "También me gustaría armar mi propia biblioteca personal".
"Antes sólo podíamos comprar medio litro de leche, pero ahora compramos 2 o 3 litros. Antes no podíamos comprar verduras caras, pero ahora nos lo podemos permitir, todo esto ha cambiado", dice.
La victoria de Sushil fue vista por 27 millones de indios, por lo tanto sin duda tiene un estatus de celebridad.
"Ahora voy a cualquier parte del país y la gente me reconoce. Quieren sacarse fotos conmigo y me piden autógrafos. Es una sensación muy buena", dice.
Desafíos
Ha tenido ofertas para aparecer en películas y programas de televisión, pero rechazó todas, excepto la versión india de "Strictly Come Dancing", "Jhalak Dhikalaja", donde duró un par de semanas."Yo era el tipo de persona que se quedaba a un costado en una fiesta si la gente bailaba, así que era 100% un desafío para mí".
Su mayor desafío está por llegar, sin embargo: la perspectiva inminente de la paternidad.
Sushil se había casado con su esposa Seema meses antes del programa, y ahora están esperando su primer hijo.
"Ahora nuestros hijos estarán muy bien educados, sus estudios van a ir muy bien", dice Seema.
El psicólogo Chugh Sanjay dice que algunas personas que se enriquecen rápidamente "tienen un subidón total", que puede hacer que se sientan "exaltadas, eufóricas y un poco grandiosas".
Es en circunstancias como esta, a veces las personas "gastan todo el dinero en un arrebato", dice.
Pero Sushil dice que nada ha cambiado en él, y que no tiene planes aún de cambiar su ciudad natal por las brillantes luces de las ciudades.
"Yo soy el mismo Sushil Kumar de antes de que gané", dice. "Y quiero seguir siendo el mismo Sushil Kumar".