miércoles, 25 de junio de 2014

Agujero millonario del plan de pensiones de los eurodiputados que pagará la ciudadanía









El fondo de pensiones gestionado por una sicav de Luxemburgo por el que ha dimitido el eurodiputado de IU Willy Meyer tenía un 'agujero' patrimonial de 207,7 millones de euros al cierre del ejercicio 2012, últimos datos disponibles, y que deberán pagar los contribuyentes.

Este déficit se calcula en base a la diferencia entre los activos disponibles y las deudas pendientes para hacer frente a la pensión de jubilación de los diputados que aún no han cumplido la edad de retiro. La Eurocámara recuerda que estos compromisos de pago "están repartidos durante varias décadas" ya que no todos van a jubilarse al mismo tiempo.

Pero también recuerda que el Parlamento Europeo, es decir, los contribuyentes europeos, es el responsable último de "garantizar el pago de los derechos de pensión para todos los antiguos y actuales eurodiputados que han participado en este fondo".

Entre los partícipes españoles de este fondo están, además del eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer, la socialista Elena Valenciano y el popular Miguel Arias Cañete, entre otros. También aparecen Rosa Díez, Jaime Mayor Oreja y Cristóbal Montoro, que fueron eurodiputados en algún momento anterior a 2009, fecha en la que se congelaron las aportaciones a este fondo.

El plan, en el que participa el 70% de los europarlamentarios españoles, se inició en 1994, cuando varios miembros presentaron una iniciativa para crear un sistema de pensiones complementario y voluntario. Por cada euro que invertía el suscriptor, la institución aportaba otros dos.