Doña Josefina esperaba que su esposo reviviera.
Una puertorriqueña conservó el cadáver
de su esposo durante 13 meses porque, según ella, el diablo había
poseído el cuerpo del anciano. La viuda no informó el deceso porque
esperaba que Dios le diera vida otra vez.
Una mujer de Carolina, municipio del área
metropolitana de San Juan, mantuvo el cadáver de su marido postrado en
una cama durante 13 meses, informó la Policía de la isla caribeña.
El cadáver, reducido ya a la osamenta de Marco Rosa Cruz, de 75 años, fue encontrado gracias a una llamada al Servicio de Emergencia que provocó la intervención de la Policía y el macabro hallazgo.
La Policía investiga una posible denuncia de una hermana del fallecido, que según parece había interpuesto una reclamación ante el Departamento de la Familia por la oposición de la esposa del fallecido a permitir ver a su familiar.
La viuda, Josefa Rodríguez, señaló a medios locales que el diablo había poseído el cuerpo de su marido, aunque no dio detalles claros de la causa del fallecimiento de su esposo.
Familiares de Rosa Cruz explicaron que la mujer había evitado reiteradamente el acceso a determinadas habitaciones de la residencia familiar y que cuando era preguntada por el estado de salud de su esposo respondía que “esperando la hora”.
La sargento del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Carolina Karen González señaló sobre el caso que cuando entrevistó el sábado pasado a Rodríguez ésta le dijo que inicialmente no dijo nada del fallecimiento porque esperaba que Dios le diera vida otra vez a su marido y que al pasar el tiempo tuvo miedo de dar a conocer el hecho.
Señaló que la mujer será entrevistada de nuevo y que la fiscal Judithmar Pérez es la encargada de determinar los cargos, si procede.
La prensa local informa que en la casa vivía además una nieta de la mujer, de 18 años, que, al parecer, conocía que el cadáver de su abuelo estaba postrado en la cama de una de las habitaciones de la vivienda.
Los vecinos de la pareja dijeron no sospechar nada de la insólita situación que se vivía en esa residencia del municipio de Carolina.
El cadáver, reducido ya a la osamenta de Marco Rosa Cruz, de 75 años, fue encontrado gracias a una llamada al Servicio de Emergencia que provocó la intervención de la Policía y el macabro hallazgo.
La Policía investiga una posible denuncia de una hermana del fallecido, que según parece había interpuesto una reclamación ante el Departamento de la Familia por la oposición de la esposa del fallecido a permitir ver a su familiar.
La viuda, Josefa Rodríguez, señaló a medios locales que el diablo había poseído el cuerpo de su marido, aunque no dio detalles claros de la causa del fallecimiento de su esposo.
Familiares de Rosa Cruz explicaron que la mujer había evitado reiteradamente el acceso a determinadas habitaciones de la residencia familiar y que cuando era preguntada por el estado de salud de su esposo respondía que “esperando la hora”.
La sargento del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Carolina Karen González señaló sobre el caso que cuando entrevistó el sábado pasado a Rodríguez ésta le dijo que inicialmente no dijo nada del fallecimiento porque esperaba que Dios le diera vida otra vez a su marido y que al pasar el tiempo tuvo miedo de dar a conocer el hecho.
Señaló que la mujer será entrevistada de nuevo y que la fiscal Judithmar Pérez es la encargada de determinar los cargos, si procede.
La prensa local informa que en la casa vivía además una nieta de la mujer, de 18 años, que, al parecer, conocía que el cadáver de su abuelo estaba postrado en la cama de una de las habitaciones de la vivienda.
Los vecinos de la pareja dijeron no sospechar nada de la insólita situación que se vivía en esa residencia del municipio de Carolina.