El Partido Popular se arrepiente de su recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) contra el matrimonio homosexual y desea que la Justicia resuelva cuanto antes legalizando las bodas entre personas del mismo sexo.
Así se desprende de un artículo publicado esta semana por la revista
TIEMPO en el que se cita al secretario de Derechos y Libertades del
Partido Popular, Iñaki Oyarzabal, quien es la voz más autorizada de la
formación para hablar de estos asuntos.
Según el artículo, el PP ha llegado a la conclusión de que, siete años
después de impugnar el matrimonio homosexual, lo mejor que puede ocurrir
es que el TC falle cuanto antes y que lo haga rechazando el recurso popular, “para dar seguridad jurídica” a las personas que se han casado en todo este tiempo.
Esta posición del PP supone un cambio evidente respecto a sus opiniones
de hace unos años, cuando se opuso con firmeza a la iniciativa
impulsada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
¿Y por qué no retira el PP el recurso que presentó en su día ante el
Constitucional para facilitar las cosas? Según fuentes populares citadas
por la revista TIEMPO, eso es prácticamente imposible porque el recurso
fue presentado gracias a la firma de 50 diputados, y solo ellos podrían
retirarlo ahora, algo que se antoja complicado porque algunos de ellos
ni siquiera forman parte ya del Congreso.
Así pues, el PP cree que lo mejor que puede pasar, y lo que seguramente
acabe pasando, es que el TC resuelva pronto a favor del matrimonio gay y
se zanje el tema para siempre.