Esto es lo que ha hecho Hollande (no palabras, hechos) en 56 días en el cargo:
- Ha suprimido 100% de los coches
oficiales y los ha subastado; y lo recaudado se destina al Fondo de
Bienestar para ser distribuido a las regiones con el mayor número de
centros urbanos con los suburbios ruinosos.
- Ha hecho enviar un documento
(doce líneas) a todos los organismos estatales dependientes de la
administración central en el cual les comunicaba la abolición de los
"vehículos de empresa" desafiando de manera provocativa e insultando a
los altos funcionarios, con frases como "si un ejecutivo que gana
650.000 euros año, no puede permitirse el lujo de comprar un buen coche
con sus ingresos del trabajo, quiere decir que es demasiado ambicioso,
que es estúpido, o que es deshonesto. La nación no necesita ninguna de
estas tres figuras". Touchè. Fuera los Peugeot y los Citroen. 345
millones de euros salvados de inmediato, y trasladados a crear (apertura
15 de agosto 2012) 175 institutos de investigación científica avanzada
de alta tecnología, asumiendo la contratación de 2560 jóvenes
científicos desempleados "para aumentar la competitividad y la
productividad de la nación".
- Ha abolido el concepto de
paraíso fiscal (definido "socialmente inmoral") y promulgó un decreto
presidencial de de urgencia estableciendo un porcentaje del 75% de
aumento en la tributación para todas las familias que, netos, ganan más
de 5 millones de euros al año. Con ese dinero (manteniendo así el pacto
fiscal) sin que ello afecte un euro al presupuesto, ha contratado a
59,870 licenciados desempleados, de los cuales 6.900 desde el 1 de julio
de 2012, y luego otros 12.500 el 1 de septiembre como profesores en la
educación pública.
- Ha privado a la Iglesia de
subsidios estatales por valor de 2,3 millones de euros que financiaban
exclusivos colegios privados, y ha puesto en marcha (con ese dinero) un
plan para la construcción de 4.500 jardines de infancia y 3.700 escuelas
primarias, iniciando un plan de recuperación la inversión en la
infraestructura nacional.
- Ha establecido el
"bono-cultura" presidencial, un mecanismo que permite a cualquiera pagar
cero impuestos si se constituye como cooperativa y abre una librería
independiente contratando al menos dos licenciados desempleados de la
lista de desempleados, con el fin de ahorrar dinero del gasto público y
realizar una contribución mínima al empleo y al relanzamiento de nuevas
posiciones sociales.
- Ha abolido todos los subsidios
gubernamentales a las revistas, fundaciones y editoriales,
sustituyéndolos por comités de "emprendedores estatales"" que financian
acciones culturales sobre la base de la presentación de planes de
negocio relacionados con estrategias de mercado avanzadas.
- Ha puesto en marcha un
procedimiento muy complejo en el que ofrece a los bancos una elección
(sin impuestos): Quien proporcione préstamos blandos a empresas
francesas que produzcan bienes recibe beneficios fiscales, quien ofrece
instrumentos financieros paga una tarifa adicional: lo tomas o lo dejas.
- Ha reducido en un 25% el sueldo
de todos los funcionarios del gobierno, el 32% de todos los diputados y
el 40% de todos los funcionarios estatales de alto nivel que ganan más
de 800 000 € por año. Con esa cantidad (alrededor de 4 millones de
euros) ha establecido un fondo que ofrece garantías de bienestar a las
"madres solteras" en condiciones financieras difíciles garantizándoles
un salario mensual por un período de cinco años, hasta que el niño vaya a
la escuela primaria, y tres años si el niño es mayor. Todo ello sin
modificar el equilibrio del presupuesto.
Resultado: pero miren qué
SORPRESA! El diferencial con los bonos alemanes cayó, por arte de magia.
Ha llegado a 101 (el nuestro viajando por 570). La inflación no ha
aumentado. La competitividad de la productividad nacional se ha
incrementado en el mes de junio por primera vez en tres años. ¿Hollande
es un genio de la economía?