Cuando estamos en un momento 
muy caliente y apasionado a veces, por la razón que sea, se nos escapan 
cosas que no son totalmente verdaderas. Nadie puede decir que está libre
 de este pecado, ni las chicas más “santicas”.
Estas son algunas de esas mentiras más comunes:
“Nunca he fingido un orgasmo”
Si Luis. Entonces ¿todas tus 
parejas sexuales han sido geniales y nunca has necesitado fingir para 
hacerlos sentir bien? Debes ser la persona más afortunada del planeta.
“Eres el único que me excita así”
Si es tu primero, pues, tiene 
sentido. Pero del resto, al menos que estés demasiado enamorada del 
susodicho, ni tú misma te lo vas a creer. Es solo una forma de evitar 
celos y explicaciones.
“El tamaño no importa”
Muy pequeño no alcanza a 
complacer y  muy grande hace daño. Es así y así seguirá siendo. Dejemos 
de repetir esto una y otra vez, ya es hora.
“No tengo fantasías sexuales”
Si una chica no confiesa sus 
fantasías es porque no te tiene suficiente confianza. No seas gafo y no 
te creas eso de que los hombres son los únicos que fantasean.
“No me gustan los juguetes sexuales”
“No hacen falta”, “¿Para qué? 
Te tengo a ti?”. A todos nos causan curiosidad. Si te dice esto de 
repente no está lista para compartir esta práctica contigo.