El famoso museo de historia natural llamado
La Specola, ubicado en Florencia, alberga una escalofriante exposición
de más de 500 réplicas humanas repartidas en diez salas. La finalidad de
dicha exposición era mostrar a los visitantes la anatomía humana sin
necesidad de tener que exponer cadáveres reales; pero lo que en un
principio se concibió como un medio divulgativo, pronto se convirtió en
una técnica con valor artístico: