Hasta ahora, esta familia
conseguía llegar a final de mes gracias a las ayudas
que recibían por la Ley de Dependencia: 320 a por la discapacidad de
Teo; 520 de Marcos, su hijo mayor, en estado vegetativo casi de
nacimiento por culpa de una meningitis; y los 300 de la pequeña Jenifer,
que padece una parálisis cerebral. En total, 1.140 a mensuales. Los
recortes aprobados en julio, pero que comenzarán a notarlos en octubre
(Castilla-La Mancha lleva dos meses de retraso en los pagos, según Teo)
harán que reciban un 15% menos. "Si con 1.140 a tenía que estar todo el
día pidiendo en la calle, ahora no sé que voy a hacer", se lamenta.
Lo más importante es que haya un plato de comida para mis hijos Por desgracia, las preocupaciones de esta familia no terminan aquí. Con la reforma sanitaria
tienen que pagar el 10% de los medicamentos.
Un gasto que no tendrían que abonar porque –según la normativa– los
enfermos crónicos, como es su caso, están exentos de pagar los fármacos.
"Ya he reclamado a la Consejería de Sanidad y me han dicho que me lo
van a solucionar, pero de momento sigo pagando". Un error que ha
obligado a Teo a tomar una decisión muy dolorosa. Desde hace unas
semanas
ha dejado de tomar su medicación para poder
costear la alimentación de su hijos. Conoce los riesgos que eso
conlleva, más cuando hace unos meses le diagnosticaron un cáncer, pero
asegura que no le ha quedado otra opción. Ya no les queda nada que
vender y él y su mujer solo hacen una comida al día. "Lo más importante
es que haya un plato de comida para mis hijos", cuenta emocionado.
Frente a Teo, su mujer –mucho más tímida– asiente con la cabeza
mientras Jenifer revolotea felizmente por el salón. "No sabemos lo que
podremos aguantar así, pero lo que está claro es que si nos quedamos en
la calle mi hijo no tendrá
ninguna esperanza de sobrevivir",
explica Yasmin, la mujer de Teo. Una situación límite que ha llevado a
esta pareja a plantearse una auténtica locura: "Por su puesto no es la
primera opción, ni mucho menos, pero si vemos que podemos morir
sufriendo en la calle nos ahorraremos el sufrimiento".
Recorte de 200 millones
Teodoro y sus dos hijos son tres de las
775.725 personas a las que atiende el Sistema de Atención de la Dependencia,
según los últimos datos oficiales publicados por el Gobierno. Con la
reforma aprobada el pasado mes de julio pasarán a cobrar como mínimo un
15% menos. La normativa establece que la rebaja podría llegar hasta el
85% de la ayuda, dependiendo de la comunidad.
Por el momento, solo el Gobierno de Castilla y León –todo un
referente en el servicio para dependientes– ha regulado la reducción y
la ha cifrado en un 30%, explicó a
20 minutos José Manuel
Ramírez, presidente de la Asociación de Directoras y Gerentes de
Servicios Sociales de España. Todo parece apuntar que en el resto de las
comunidades la rebaja podría superar el 15%, más cuando el Gobierno
anunció el jueves de la semana pasada que
el anteproyecto de presupuestos para la dependencia recoge otro severo recorte para el año que viene:200 millones de euros menos y se queda en 1.087 millones.
¿Cuánto bajarán las ayudas?
Muchas familias de Castilla-La Mancha recibieron este mes una carta anunciándoles que
les reducían la ayuda a la mitad.
Este es el caso de Ana y Raquel (foto). Cuando recibieron la
notificación protestaron a la Consejería de Sanidad. Al final, todo
quedó en un error, y la rebaja se quedó en el mínimo impuesto por la
ley, un 15%. Las asociaciones de dependientes creen que el error
manchego es una pista de por dónde podrían ir los tiros en muchas
regiones. Las Comunidades Autónomas podrán
reducir las prestaciones hasta un 85%.